Maluma, el aguacate y cemento serán la representación colombiana en el espectacular Super Bowl ​

Estarán en la final de la ‘Liga de fútbol americano’ de Estados Unidos, la cual es seguida anualmente por más de 110 millones de espectadores alrededor del mundo.

El 3 de febrero de 2019 se realizará la edición 53 del Super Bowl, uno de los eventos deportivos más importantes del mundo, porque aunque el fútbol americano es un deporte con favoritismo norteamericano (por encima del fútbol – soccer y el baloncesto), las cifras que facturan en publicidad mundial son astronómicas.

Cemento y aguacates de exportación

Foto: Instagram @losmasdecolombia

El Mercedes-Benz Stadium del estado de Georgia es donde se jugará el Super Bowl, y esta joya arquitectónica se edificó con más de 25 mil viajes de camiones mezcladores y más de 153 mil metros cúbicos de concreto de la empresa colombiana Cementos Argos. Además, el Ministerio de Agricultura de Colombia estima que los estadounidenses consumirán aproximadamente 100 toneladas de aguacate hass colombiano, en su mayoría cultivado en el departamento del Quindío.

Maluma será la representación latina

Foto: Instagram @maluma

El cantante colombiano fue contratado por una marca de cerveza para participar en uno de los comerciales, que se puede ver desde ya en Youtube. La noticia se conoció inicialmente por el mismo cantante, quien publicó la noticia en Instagram. Maluma no protagoniza el anuncio, es una participación, un cameo (aparición breve) en la parte final de la publicidad.

La marihuana medicinal no “jugará”

Foto: Pixabay.com

El cannabis es cada vez más legal en Estados Unidos para usos medicinales; sin embargo, no ha logrado tanta aceptación como para ser emitido durante un Super Bowl, y no le permitieron emitir un comercial por el que estaban pagando más de los 5 millones de dólares que cobran por 30 segundos (más de 15.750 millones de pesos). El presidente de Acreage Holdings, George Allen, mencionó que el anuncio se enfocaba en cómo ha ayudado la marihuana medicinal a las personas con dolor, incluyendo a un niño con síndrome de Dravet que sufría de ataques de epilepsia.